La llegada de inmigrantes a España se ha reducido luego de 10 años de incremento, se cree que esta tendencia de baja se mantendrá en respuesta a la grave crisis que atraviesa España.
España era uno de los mayores receptores de inmigrantes de la Unión Europea, con un mercado laboral necesitado de mano de obra, a partir del año pasado los flujos de llegadas de inmigrantes con un crecimiento de alrededor de un 7% en el 2008, se han detenido.